viernes, 30 de octubre de 2009

Dulce franquicia letal.


La vida te quita, te da, y te vuelve a quitar.
El cielo se abre de par en par,
y desgusta tus sentidos, regalándote infinidad.
¿A qué vinimos, y adonde vamos?
Sabés que hay riqueza, sabés que hay sin sabores,
y sin embargo, terminás siendo la carnada del destino
una vez más...

Pero esa cornisa, sumisa, te vuelve a cautivar.
El cielo se tiñe, y es rojo el mar.
Y ahi lo ves, pobre arbolito,
sus hojas ya no están, su corteza quemaron,
¡pero es un árbol igual!
Y acá vamos. Te lo acaban de mostrar
una vez más...

¿Y ahora dónde caerán mis lágrimas?
Si en tu pecho ya no pueden llorar.

sábado, 10 de octubre de 2009

Ella.


Ella brilla, retraida,
indiferente a otras miradas,
y sus piernas solas bailan,
sin cadencia, al desenfreno.
Esos ojos contagian
la apacible sensación
de querer secuestrarle,
aunque sea una vez, su corazón.

Cada cruce te seduce.
Ay nena, ¿a quién buscás?
Dejá a tu cuerpo quedarse.
Ay nena, ¿qué tal si me mirás?

Miro fijo, te sonrío,
ni una puta conmoción.
Ciega y fiel a tus latidos
vulnerás a todo intento.
Intento avecinarme
a tu atenuado andar,
y me ayudás a ahogar
mis ilusiones al río.

Cada cruce te seduce.
Ay nena, ¿a quién buscás?
Dejá a tu cuerpo quedarse.
Ay nena, ¿qué tal si me mirás?

Es todo lo que pido,
un beso y nada más.
Ese que te desenlace
del temor que acariciás.


[Tema que escribí hace bastante. Mucho no me gusta, pero como a otros sí, lo comparto]

martes, 6 de octubre de 2009

Solía serlo.


Veo en tus aguas, mar negro,
olas fugaces a las que no me atrevo.
Lágrimas de sangre y de lamento
llenaron sin vida tu dulce tormento.

Todo bajo un rumbo incierto,
vacío desierto, asalta mi sed.
Siempre insinuando a morder
esa endeble soga, dispuesto a caer.

Solía hacerlo sin miedos,
desterrando infiernos sin paz.
Solía hacerlo de nuevo.
Estrechás tu mano, jamás la darás.

Mis pies la siguen de cerca,
tan insensata e irreal.
Tus manos acarician las penas
de los que pronto se irán.

Cae otra alma del cielo,
se inundan sus sueños, sin más.
Ya no tendrá un paradero
en este destino voraz.

Solía serlo, hoy no puedo,
merezco mi libertad.
Solía serlo, y hoy veo
fracasar a la humanidad.